Es la reivindicación de muchas mujeres que tienen que lidiar cada mes con los efectos secundarios de los anticonceptivos femeninos:
[pulledquote]“¿Por qué no inventan algo para ellos?”[/pulledquote] Hasta ahora, todos los intentos médicos han resultado fallidos, pero puede que la situación cambie en breve. La creación de una píldora anticonceptiva masculina puede estar más cerca después de una nueva investigación que ha conseguido hacer descender el número de espermatozoides en ratones de forma reversible, por lo que no afectaría a la fertilidad.
Las esperanzas están puestas en JQ1, un compuesto que penetra en la sangre de los testículos y altera el proceso de maduración de los espermatozoides. ¿El resultado? Hay menos espermatozoides y de menor calidad, pues son menos móviles.
Por ahora, los investigadores estadounidenses encargados del estudio, pertenecientes al Dana-Farber Cancer Institute (Boston) y al Colegio Baylor de Medicina (Houston), han constatado los efectos del JQ1 en ratones, pero consideran que “estos hallazgos sugieren que un método anticonceptivo masculino reversible puede ser posible”.
Hasta el momento, los grandes inconvenientes de los ensayos con la píldora anticonceptiva masculina eran su efecto negativo hacia las hormonas masculinas (testosterona) y la disminución del deseo sexual. Lo novedoso de este estudio es que el JQ1 no afecta a la producción de testosterona ni hace descender la libido. Además, tampoco repercute en la salud de los hijos concebidos después.
¿Estaremos, por fin, más cerca de la píldora anticonceptiva masculina?
Fuente: En Femenino
Editado por: Lissa GF